En el párrafo siguiente Llach hace una interesante crítica a la oposición actual. Casi tan destacable como la frase de Jorge Rivas de que lo que más lo seduce del kirchnerismo son sus enemigos. “Nuestro pobre antikirchnerismo –no el mío– es tan furibundo que la única condición que pone para transformar a alguien en héroe es que esté contra los Kirchner, llámese ese alguien Raúl Castells, Francisco de Narváez, Alfredo De Angeli, Víctor De Genaro, Grupo Clarín, “Ingeniero” Blumberg, Julio Cobos o, como en esta ocasión, Martín Redrado”, remata el docente de la Universidad Torcuato Di Tella
Además el economista en el cuerpo de la nota califica la gestión de Redrado como “lamentable” y “desastroza”. En esa línea justifica:
“Es el banquero central que más puntos agregó a la inflación de su país durante esta década en todo el mundo — fueron alrededor de 12%”

“La gestión de Martín Redrado ha sido la de un muñeco una marioneta kirchnerista no más difícil de manejar que un Guillermo Moreno o un Daniel Scioli”
Por último Lucas Llach, quién se autodefine como antikerchnerista, sentencia la actitud “marioneta” de Redrado:
“Los cantos martinianos a la autonomía del Banco Central son, a esta altura, muy tardíos. Durante años Redrado permitió que le manejaran la política monetaria, la política cambiaria (que son casi lo mismo) y la política de distribución de dividendos del Banco Central. ¿Tiene sentido ahora que la oposición política salga a inmolarse en su defensa? No: salir en defensa de un banquero central que ha sido absolutamente dependiente del Poder Ejecutivo no es la mejor manera de garantizar la automonía del Banco Central. Permitir que lo echen transmite un mensaje bastante claro: a quien se comporte como marioneta no habrá que defenderle la vida, porque nunca la ha tenido”, dice.
Me encantan los análisis inteligentes y evaluadores de complejidad.
ResponderEliminarGracias Fernando!
Saludos
Verónica